Por: Angela Gheller, directora de Productos para Manufactura en TOTVS
La quinta generación de redes móviles, 5G, está revolucionando varios sectores de la economía global y la industria no es una excepción. En América Latina, una región con economías diversificadas y un sector manufacturero relevante, la llegada y evolución de 5G promete traer impactos significativos y transformar la forma en que se llevan a cabo las operaciones industriales.
Según el estudio “Por qué 5G en América Latina” de 5G Americas con Omdia y Nokia, el 5G podría generar US$3,3 billones de valor económico y social para América Latina hacia 2035, creando hasta 15 millones de nuevos empleos en la región y aumentando la productividad de la industria latinoamericana en hasta 25% en el período, lo que representaría alrededor de US$9 billones.
Al evaluar el panorama 5G en Latinoamérica, planteé los principales puntos de atención en relación con los beneficios y desafíos que las industrias latinas deben tener en cuenta con la evolución y expansión de esta nueva generación de red móvil.
Manufactura Inteligente
Hace tiempo que hablamos de Industria 4.0 aquí en América Latina, pero la realidad es que este concepto aún no es una realidad para todas las empresas. Todavía encontramos muchas industrias que controlan la fábrica manualmente, utilizando hojas de cálculo y papeles. Con la llegada del 5G, estas empresas tendrán aún más ventajas a la hora de invertir en la digitalización de sus operaciones, ya que podrán registrar y transmitir una serie de información de forma más rápida, agrega la ejecutiva de TOTVS.
La confiabilidad de la información, y la consiguiente mitigación de errores, que brinda la digitalización combinada con la agilidad de la transmisión de datos promovida por 5G permite al liderazgo tomar decisiones más asertivas y estratégicas, impulsando los resultados.
Conectividad en aumento
Ya he comentado hasta qué punto la red 5G permite ampliar la conectividad entre dispositivos. Se estima que una red 4G permite 100 mil conexiones por metro cuadrado, mientras que una red 5G permite 100 millones de conexiones por metro cuadrado. En otras palabras, un aumento de 10 veces en las conexiones entre dispositivos, haciendo que los procesos sean aún más inteligentes y rápidos, aumentando aún más la productividad empresarial.
Este escenario, sin duda, puede ser un impulsor del uso del Internet de las Cosas (IoT) en la industria nacional. La nueva red móvil permite una mejor conexión y agilidad para la adopción de sensores en equipos industriales que permiten la recolección y análisis de datos en tiempo real. El IoT avanzado facilita el seguimiento de las operaciones, el mantenimiento predictivo y la optimización de la eficiencia, todo de forma rápida y con baja latencia.
Movilidad operativa
La evolución del 5G también podría impulsar otro aspecto que vengo diciendo desde hace tiempo que es fundamental para la modernización de la manufactura latina y uno de los pilares de la Industria 4.0: la movilidad.
En la industria, el concepto de movilidad hace referencia a la capacidad de gestionar datos en tiempo real desde cualquier lugar donde se encuentre, lo que representa un paso importante en el avance de la digitalización. Los dispositivos móviles (teléfonos inteligentes, tabletas, etc.) ya forman parte de nuestra vida diaria, y es urgente que también formen parte de la rutina de la industria en las fábricas. Esta movilidad apoya enormemente el proceso de toma de decisiones, ya que cuando se necesita tomar una decisión basta con acceder a un dispositivo móvil, consultar los datos y ejecutar lo necesario, de acuerdo con la estrategia de negocio.
Automatización sin errores
En relación con el último punto, con la baja latencia de la red 5G, las operaciones de fabricación se pueden automatizar con aún más precisión. Las máquinas pueden controlarse de forma remota y en tiempo real, permitiendo ajustes inmediatos en caso de variaciones, problemas o incluso demanda. Esta posibilidad da como resultado una producción más consistente, rápidamente adaptable y más rentable.
Ciberseguridad
Este punto puede ser un desafío para varias industrias en América latina a la hora de avanzar en su viaje de transformación digital. Con el probable aumento del volumen de información que se procesa rápidamente a través de 5G, la ciberseguridad necesita una atención especial, con inversión en medidas de seguridad y protección de sistemas y datos.
Otro punto relacionado con la seguridad es el entrenamiento del equipo. De acuerdo con la mayor adopción de tecnologías diarias de la industria, es necesario entrenar a los empleados en el uso de estas herramientas. Mientras más empleados estén capacitados en toda la digitalización, más seguras serán las actividades y al mismo tiempo mejor será el aprovechamiento productivo.
La inversión en tecnología se beneficia del avance del 5G, proporcionando ganancias no sólo para los procesos industriales, sino también para los resultados empresariales. El mayor uso de la tecnología califica la producción, mitiga fallas y pérdidas financieras, genera más competitividad y atrae inversiones. Es una evolución que favorece y valoriza toda la cadena nacional, elevando el nivel de eficiencia e innovación de la industria en América latina, concluye Angela Gheller, directora de Productos para Manufactura en TOTVS.