Pese a las inversiones de retorno, cientos de indígenas regresaron a Bogotá

Un grupo de indígenas Embera regresó a Bogotá con el argumento de que no tienen garantías por parte del Gobierno para permanecer en sus regiones.

Ese es la principal razón de este grupo de al menos 500 de los indígenas Embera que salieron de las distintas Unidades de Protección Integral en Bogotá (UPI) hacia sus sitios de origen y que nuevamente llegaron a la capital del país en los días recientes a ocupar nuevamente las UPI del parque La Florida, La Rioja en el centro de la ciudad y el parque Nacional, que ya habían desocupado y que nuevamente volvió a ser invadido por decenas de personas de estas comunidades.

También puedes leer: Bogotá en el top 3 de ciudades de Latinoamérica donde más tiempo se pierde

De acuerdo con información entregada por el Distrito, lo que dicen los indígenas es que el Gobierno los dejó prácticamente a la deriva en sus territorios y no les está dando las garantías necesarias en materia de seguridad, educación ni de cultivos para permanecer allá, por eso, a pesar de que costó 800 millones de pesos retornarlos, dinero que salió de la Unidad de Víctimas, en resumidas cuentas, esa plata se perdió.

Líderes de las comunidades indígenas intentaron entrar a la fuerza a las instalaciones de la Alcaldía, donde finalmente tuvieron una reunión con las autoridades distritales e incluso hizo presencia la Defensoría.

Por el momento, no hay solución cercana para el retorno de estas comunidades, pese a que el alcalde Carlos Fernando Galán ha tenido varias reuniones con el Gobierno Petro, sobre todo con la directora del DPS, Laura Sarabia, para darle garantías de retorno a las comunidades.

Te puede interesar: Policía capturó a un fletero tras hurto en la localidad de Puente Aranda

Scroll al inicio