En la noche de ayer, cinco hombres incluyendo cuatro ecuatorianos y un colombiano, fueron arrestados debido a su posible conexión con un carro bomba que provocó múltiples explosiones en una concurrida área comercial en el centro de Quito. Afortunadamente, no hubo víctimas mortales como resultado de este incidente.
El general de la Policía, Pablo Ramírez, proporcionó declaraciones a los medios desde la ubicación donde se produjeron las explosiones. Confirmó que algunos de los detenidos cuentan con historiales delictivos previos, incluyendo casos de extorsión, robo y asesinato.
Te puede interesar: Masacre en Brasil; tres niños y seis adultos fueron asesinados en Bahía
Los detenidos permanecen bajo custodia mientras esperan su comparecencia ante las autoridades judiciales. Mientras tanto, las fuerzas policiales han acordonado la zona de las explosiones para recolectar más pruebas relevantes.
Ramírez también detalló que tres de los individuos habían sido aprehendidos hace dos semanas en relación al robo de un camión y casos de secuestro en diversas partes de la ciudad. Sin embargo, habían sido liberados bajo condiciones por el sistema judicial.
El general Ramírez compartió información acerca de cómo los seis individuos fueron capturados. Fueron detenidos mientras viajaban en un vehículo que había sido reportado como robado. De manera similar, el automóvil utilizado en el presunto atentado también había sido previamente robado.
Aunque inicialmente la Policía sugirió que las explosiones eran el resultado de un incendio en el vehículo, el general Ramírez reveló que, durante la inspección, se encontraron dos cilindros de gas, mecha lenta y elementos «aparentemente relacionados con dinamita».
#ATENCIÓN TERROR EN QUITO.
— CENTRO Digital (@radiocentroec) August 31, 2023
La noche de este miércoles después del atentado con ‘coche bomba’ reportado en La Mariscal (Quito), se reportó más explosiones en el centro de la capital. Vídeos circulan con imágenes de autos incendiándose.pic.twitter.com/vMzyHQBLPN
Es importante resaltar que ataques similares con coches bomba han ocurrido previamente en Quito el año pasado, así como en la ciudad portuaria de Guayaquil. Estos incidentes han resaltado la persistente violencia en el país.
Ramírez especuló acerca del motivo detrás del atentado, sugiriendo que podría tratarse de una represalia por parte del crimen organizado en respuesta a traslados de presos entre diferentes cárceles durante ese día.
El mismo día del atentado, se llevó a cabo una operación conjunta entre la Policía y las Fuerzas Armadas en la prisión de Latacunga, ubicada en la provincia andina de Cotopaxi. Esto desencadenó motines en otras cárceles, incluyendo Cuenca y Azogues, capitales provinciales de Azuay y Cañar, respectivamente.
También puedes leer: Incendio de Grecia, el peor de Europa, lleva 12 días sin control alguno
Las cárceles involucradas en estos eventos, Latacunga, Cuenca y Azogues, se sospecha que están bajo la influencia de la banda criminal conocida como Los Lobos. La serie de intervenciones busca desmantelar estas bandas y prevenir futuras tragedias dentro de los centros penitenciarios.
La violencia en las cárceles ecuatorianas ha tenido efectos significativos en la sociedad. Los esfuerzos para controlar estas situaciones han llevado al país a implementar medidas excepcionales. El número de homicidios intencionales ha aumentado notablemente en los últimos años, lo que subraya la necesidad de abordar la problemática con determinación y estrategia.