Catar sería el país donde Gobierno adelantaría el diálogo con “Clan del Golfo” 

Tras el anuncio del viernes pasado del presidente Gustavo Petro sobre el “inicio” de diálogos de paz con el Clan del Golfo fuera del país, varias hipótesis apuntan a que el lugar donde se estarían dando esos diálogo sería Catar

Aunque aún no hay confirmación de la Oficina del Consejero Comisionado de Paz, varias fuentes le han dicho a este diario que Álvaro Jiménez, jefe de la delegación de Gobierno en ese proceso de paz ha hecho varios viajes a ese país para ambientar una posible negociación. 

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“Hemos iniciado conversaciones fuera de Colombia con el autodenominado ejército gaitanista (…) La condición para hacer un trato que tiene que ver con el mundo jurídico, por eso se llama socio jurídico no depende tanto de mí, se ha presentado un proyecto de ley que ojalá el Congreso de la República estudie a profundidad”, anunció el mandatario el viernes desde Córdoba. 

Durante su discurso, el mandatario señaló que las condiciones para dialogar o hacer un trato están sujetas al marco jurídico que presentó recientemente el Ministerio de Justicia, en cabeza de Eduardo Montealegre, al Congreso. 

“Lo que dice el presidente es lo que es. Para nadie es un secreto que desde el inicio de este gobierno ha habido una decisión de persistir, de insistir en el diálogo, de tratar de construir, de avanzar en medio de todas las tormentas y dificultades que tiene una sociedad donde se expresan los fenómenos de la violencia y de la criminalidad transnacional, este gobierno ha decidido siempre persistir en construir una solución a esas violencias. Y cuando tengamos resultados de beneficio para las comunidades que mostrar, los vamos a compartir con la sociedad”, dijo Jiménez. 

De acuerdo con Jiménez, desde diciembre del 2023, tanto el como el comisionado de paz, Otty Patiño, han “desarrollado un trabajo particular” con el Clan del Golfo, aunque no adelantó mayores detalles

“Desde el inicio de este Gobierno ha habido distintos escenarios y cuando tengamos resultados concretos vamos a compartirle a la sociedad todo lo que se ha venido haciendo. Todo se está construyendo de manera discreta y de manera confidencial en una búsqueda de construir los resultados que se requieren”. 

La última vez que se anunció un avance en este proceso fue el pasado 4 de febrero cuando se dio a conocer que se empezaría un diálogo exploratorio. Ese día también se reveló un video en el que Jiménez aparecía con Jobanis de Jesús Ávila, conocido como ‘Chiquito Malo’ y máximo jefe del grupo ilegal, durante uno de esos encuentros. 

El Clan del Golfo, también conocido como Ejército Gaitanista de Colombia (EGC), es la mayor estructura criminal del país y uno de los principales herederos del paramilitarismo tras la desmovilización parcial de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) en 2006. 

Surgido inicialmente bajo el mando de alias “Otoniel” en la región de Urabá, el grupo ha extendido su influencia a más de una docena de departamentos, combinando economías ilegales como el narcotráfico, la minería ilícita y la extorsión con un control territorial basado en redes armadas y alianzas locales. 

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El Clan del Golfo es un desafío central para las políticas de seguridad y paz en Colombia, y en un actor que el gobierno de Petro ha intentado incluir, sin éxito pleno, en su política de “paz total”. 

¿Por qué Catar? 

Catar, un pequeño pero influyente Estado del Golfo Pérsico, ha construido en las últimas dos décadas un perfil internacional desproporcionado frente a su tamaño geográfico gracias a su riqueza gasífera, su diplomacia activa y su papel como mediador en conflictos regionales y globales. 

Su capital, Doha, ha sido sede de diálogos de paz y negociaciones complejas —incluyendo procesos sobre Afganistán, Palestina y Sudán—, aprovechando una política exterior basada en la neutralidad estratégica. 

Este enfoque le ha permitido actuar como puente entre actores enfrentados, manteniendo relaciones tanto con potencias occidentales como con movimientos islamistas y gobiernos regionales, a pesar de las tensiones con otros países árabes. 

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