Desde el próximo 30 de septiembre y hasta el 14 de octubre de 2024, se llevará a cabo el VIII censo de ciudadanas y ciudadanos habitantes de calle, como parte de la estrategia para reducir las formas extremas de exclusión contra esta población, una de las apuestas del Plan Distrital de Desarrollo ‘Bogotá Camina Segura’.
El censo tendrá un total de 42 preguntas con 13 dimensiones, su análisis será entre octubre y noviembre, los primeros resultados se presentarán a finales de año y sus resultados finales se conocerán en enero de 2025. Para su desarrollo, participarán la Secretaría de Integración Social, el Instituto Distrital para la Protección de la Niñez y la Juventud (IDIPRON) y la Secretaría de Planeación.
Roberto Angulo, secretario Distrital de Integración Social, destacó: “En el censo la ciudad estará dividida en 699 cuadrantes, participarán 599 personas, durante 15 días y 15 noches en tres jornadas, en las fases de alistamiento, apertura, desplazamiento, recolección y entrega de la información. La información se va a utilizar en distintos componentes de la estrategia de prevención y mitigación, para toda la estrategia de prevención del consumo problemático de sustancias psicoactivas, prevención de violencia en el contexto familiar y los proyectos de vida para la superación de habitabilidad en calle que, además, nos va a servir para determinar también, tanto la localización de las unidades operativas como las características que estas van a tener”.
La estrategia para reducir las formas extremas de exclusión en Bogotá aborda la invisibilidad estadística de las personas habitantes de calle, un factor que limita sus oportunidades de transformación y les impide superar su situación de habitabilidad en calle. Así mismo, una de las metas de la estrategia será la apertura de siete unidades operativas adicionales para la atención de habitantes de calle, la vinculación de 1.500 personas en programas de prevención de riesgo de habitar la calle y 3.400 ciudadanos en servicios sociales de permanencia.
Algunos de los objetivos de este censo es establecer el número y la ubicación de la población habitante de calle, determinar los factores asociados a la habitabilidad en calle y generar información actualizada que permita a las entidades el diseño de la oferta de servicios integrales, además, permitirá conocer las principales necesidades que enfrenta esta población y recopilar variables de identificación de los habitantes de calle que permitan el cruce con registros administrativos, para el desarrollo de las políticas públicas.
Carlos Cardozo, subdirector para la Adultez de la Secretaría de Integración Social, afirmó: “Es responsabilidad de la Secretaría de Integración Social y del sector social de Bogotá, que tengamos unos datos que, realmente nos acerquen a la realidad de nuestra ciudad. Esto nos va a permitir tomar decisiones más acertadas acerca de cómo podemos enfrentar el fenómeno de habitabilidad en calle y las diferentes formas extremas de pobreza”.
El último censo de habitantes de calle en Bogotá, realizado en 2017, registró 9.538 personas viviendo en esta condición. Sin embargo, se estima que esta cifra ha aumentado en los últimos años debido a la emergencia sanitaria por el Covid-19, la crisis económica y los flujos migratorios.