El gobierno de Colombia insistirá ante las autoridades de Ecuador en un calendario de la salida de colombianos, ante el anuncio oficial de ese país de la llegada de un nuevo grupo de compatriotas deportados al Puente de Rumichaca.
La Cancillería colombiana espera el arribo de 493 personas deportadas entre el miércoles y el jueves de la próxima semana, indicó la ministra encargada de Relaciones Exteriores, Rosa Yolanda Villavicencio Mapy.
La funcionaria manifestó que es importante contar con información oficial y oportuna, y solicitó a las autoridades ecuatorianas que remitan detalles adicionales sobre los listados entregados a través de los conductos regulares.
Hasta el momento, Ecuador ha remitido una única lista de unas 300 personas, sin información complementaria.
El pronunciamiento de la ministra Villavicencio se da luego de la coyuntura vivida ayer viernes y hoy sábado, 26 de julio, en la que las autoridades del vecino país expulsaron a 603 connacionales.
De ese total, 543 eran hombres y 60 mujeres. A ellos se le brindó asistencia y alimentación a su llegada, se verificó su identidad y se realizó el control migratorio y verificación de antecedentes por parte de la Policía Nacional, con base en el protocolo de recepción acordado entre entidades.
Se determinó que 11 de los connacionales tienen orden de captura, uno de ellos con circular de la Interpol. De igual forma, se garantizó el desplazamiento de las personas a sus lugares de origen, en cumplimiento de la ruta establecida.
Garantizar atención
La titular de la cartera de Relaciones Exteriores enfatizó que se precisa lograr el acuerdo de protocolo con el país vecino, de tal forma que se pueda garantizar un trato digno y ofrecer una atención adecuada e integral a los retornados, tal y como lo señala la ley 2136 de 2021, que establece las responsabilidades de las entidades en el retorno masivo.
En un Puesto de Mando Unificado (PMU) instalado en la zona, representantes de distintas entidades del orden local y nacional ajustaron los protocolos de recepción y verificación para garantizar el respeto de los derechos humanos y el acompañamiento institucional adecuado.
El coronel Pablo Galindo, comandante de la Policía Nariño, informó que se cuenta con 60 efectivos garantizando la seguridad de la zona.
Funcionarios del Departamento del Prosperidad Social (DPS) y del Ministerio de la Igualdad se hicieron presentes para articular el recibimiento, atención y desplazamiento a sus lugares de origen al grupo de deportados, según lo solicitaron ellos, junto con las autoridades locales y regionales.